El Juzgado de Garantía de Cañete ha dispuesto la prisión preventiva de V.I.M.M., quien ha sido acusado como coautor en la comisión de tres delitos consumados de incendio, dos delitos frustrados de homicidio calificado y otros delitos consumados de robo con violencia, porte ilegal de armas de fuego, transporte de municiones consumidas y disparos injustificados en la vía pública, todos ellos perpetrados en agosto de 2022 durante un ataque al molino Grollmus en la comuna de Contulmo.
Durante la audiencia de formalización que tuvo lugar el jueves, la jueza Paula Caprile Costa determinó la prisión del quinceavo miembro del movimiento Resistencia Mapuche Lafkenche (RML), argumentando que la libertad del imputado representa un riesgo para la seguridad de la sociedad y las víctimas. Asimismo, se mantuvo el plazo de investigación de seis meses, establecido en diciembre pasado.
Según lo expuesto por la fiscalía, alrededor de las 16 horas del 29 de agosto de 2022, un grupo de aproximadamente treinta individuos, incluído V.I.M.N., se congregó en una cancha del sector Antiquina, Cañete, donde planearon un ataque a las propiedades de la familia Grollmus, utilizando radios para la comunicación y desplazándose a través de caminos poco transitados en al menos tres camionetas.
En este contexto, la única imputada, C.A.N.L., se encargó de proporcionar cobertura durante el ataque, manteniendo contacto radial con su pareja y el líder del grupo, C.E.A.C., para alertar sobre cualquier eventualidad.
A su llegada a las cercanías de la propiedad, C.A.N.L. asignó funciones, distribuyó armas cortas y largas, municiones, chalecos antibalas y radios. Así, parte de los atacantes, portando antorchas y líquido inflamable, incendiaron una casa vecina, propiedad de Lorena Caamaño Sánchez, que no se encontraba en su domicilio, y que terminó completamente consumida por el fuego.
Simultáneamente, un segundo grupo, compuesto por una docena de personas, atacó en un camino secundario a las víctimas Mario Hernán González Arce y Celso Hernaldo Carrillo Castillo, quienes realizaban trabajos forestales y se desplazaban en una camioneta.
Tras amenazarlos con escopetas, los obligaron a descender de su vehículo, apropiándose de la camioneta, un par de motosierras y los teléfonos celulares de los trabajadores. Después de atarlos de pies y manos, sustrajeron la camioneta, la cual utilizaron junto con otro vehículo, previamente robado a Fabiola Herrera Arrepol, para bloquear el acceso al molino Grollmus.
Entre las 17:30 y 18 horas, los atacantes accedieron de manera violenta al predio donde se encuentra el molino en la comuna de Contulmo, que corresponde al kilómetro 1.220 de la Ruta P-700, propiedad de Edward Helmuth Wilfred Grollmus Schröeder. En este terreno también se hallaba la casa donde residía la víctima con su hijo Christian Pablo Grollmus Fritz, así como un museo y bodegas.
Los agresores rodearon la casa familiar y abrieron fuego contra ella. La respuesta llegó de Christian Grollmus, quien disparó con una escopeta de 12 milímetros acompañado por su padre, quien utilizó una escopeta de 16 milímetros.
En medio del tiroteo, los atacantes incendiaron la leñera, el molino y el museo familiar, los cuales quedaron completamente destruidos, así como los vehículos de los residentes de la casa: una camioneta perteneciente al padre y un station wagon del hijo.
Paralelamente, otro grupo ingresó a una vivienda adyacente y redujo de manera violenta a Carlos Enrique Grollmus Thiele (de 79 años), a quien usaron como escudo para protegerse de los disparos que provenían de la casa principal.
Luego, agredieron al anciano con puñetazos y patadas, y uno de los imputados le disparó con una escopeta a corta distancia en la pierna izquierda, causando una herida que comprometió su vida y requirió la amputación de la extremidad.
Durante el ataque, los imputados también sometieron a Ramón Nonato Cid Gutiérrez (de 75 años), quien se encontraba dentro de un automóvil cerca del lugar, esperando a su hijo. Al sacarlo del vehículo y arrojarlo al suelo, el hijo de la víctima, Christian Rodrigo Cid Ferreira, intervino, pero uno de los atacantes le disparó con una escopeta de 12 milímetros en el rostro, causándole un traumatismo ocular y la pérdida de visión en su ojo derecho, además de otras lesiones por los perdigones.
Una vez que se conoció la situación, carabineros de la Tenencia de Contulmo se movilizaron hacia el lugar en una camioneta y un vehículo blindado, pero tuvieron que continuar a pie debido a los obstáculos en la ruta establecidos previamente por los imputados. Al llegar al sitio, hicieron uso de sus armas de fuego institucionales, lo que llevó a los atacantes a huir en las camionetas que utilizaban.
PURANOTICIA
Con Información de puranoticia.pnt.cl
