La emblemática rueda de la fortuna de Viña del Mar, que se convirtió en una de las atracciones más destacadas del verano en el borde costero, comenzó a ser retirada este lunes tras el cierre de la temporada estival.
La estructura, que iluminó el borde costero desde diciembre de 2024, se convirtió en una de las atracciones más populares del verano, atrayendo a miles de turistas y residentes con su imponente presencia y vistas panorámicas del océano y la ciudad.
Ubicada en la Avenida Perú, frente al Casino Enjoy, la rueda de 40 metros de altura ofreció una experiencia única para visitantes que, por $6.000, pudieron disfrutar de un paseo con una perspectiva privilegiada de Viña del Mar. Su instalación no estuvo exenta de dificultades, pues en febrero un desperfecto mecánico dejó atrapados a 35 turistas en sus cabinas, un incidente que afortunadamente no tuvo consecuencias mayores.
¿Por qué la Gran Rueda no se quedará en Viña del Mar?
Según informaron desde la productora Street Machine, responsable de la atracción, la Gran Rueda forma parte de un proyecto itinerante que busca “potenciar el turismo local y resaltar la riqueza histórica y cultural de cada ciudad”. Es decir, su presencia en Viña del Mar fue solo temporal, ya que está previsto que la estructura continúe su recorrido por otras regiones del país.
Aunque aún no se ha confirmado cuál será su próximo destino, la productora aseguró que el paso de la rueda por la Ciudad Jardín superó las expectativas en cuanto a asistencia y recepción del público. “Agradecemos a Viña del Mar por la gran acogida que tuvo la Gran Rueda. Ha sido una experiencia increíble”, señalaron en conversación con La Tercera.
El desmontaje de la rueda simboliza el fin de la temporada de verano en Viña del Mar, dejando abierta la posibilidad de nuevas atracciones en el borde costero para los próximos meses.