La creciente preocupación por la seguridad en la Región de Valparaíso ha llevado a un notable aumento en la demanda de guardias de seguridad tácticos, conocidos como «guardias ninjas». En la Ciudad Puerto, se reporta que entre 200 y 300 vigilantes se acreditan mensualmente en cursos de capacitación regulados por el OS-10 de Carabineros.
Carlos Castillo, jefe de la oficina del OS-10 en Valparaíso, explicó que su función principal es supervisar la capacitación de personal de seguridad privada, que incluye áreas como el transporte de valores, seguridad en bancos, cajeros automáticos, y otros servicios. En la comuna de Valparaíso, se estima que existen alrededor de 10 empresas capacitadoras que están formando a estos guardias, especializados en medidas de seguridad más avanzadas.
José Peña Avello, diplomado en administración de seguridad privada y capacitador acreditado por Carabineros, explicó que los “guardias ninjas” surgieron como una respuesta a la inseguridad durante el estallido social. Estos vigilantes tienen una función disuasiva y están equipados con cascos, chalecos antibalas, coderas, rodilleras, y bastones retráctiles, lo que les otorga un perfil imponente y los hace aptos para enfrentar situaciones de alto riesgo.
Este modelo de seguridad ha ganado popularidad debido a la necesidad urgente de reforzar la protección en espacios públicos y privados en medio de la creciente crisis de seguridad en la región. Las empresas de capacitación se han visto obligadas a aumentar la cantidad de cursos y personal capacitado, ya que la demanda continúa en ascenso.
Con información de La Estrella de Valparaíso.
