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Los ministros del Interior, Álvaro Elizalde, y de Vivienda y Urbanismo, Carlos Montes, lideraron la ceremonia conmemorativa del centenario del Funicular de Santiago, un emblemático medio de transporte del Parque Metropolitano, declarado Monumento Histórico en 2000, que ha realizado 1.460.000 viajes.
Durante el evento, las autoridades recorrieron el trayecto desde la estación Pío Nono hasta la estación Cumbre, donde visitaron el Café Tudor, la cafetería más alta de Santiago, que cuenta con dos miradores hacia la sala de máquinas del funicular.
El ministro Montes resaltó que a través del Funicular de Santiago “han pasado muchas generaciones de niños, jóvenes y familias que han construido su vida en este parque. Es crucial que no solo vivamos estas experiencias, sino que también las compartamos, sintiendo que esto forma parte de la ciudad, para construir comunidades más humanas y en convivencia.”
Por su parte, el ministro Elizalde subrayó que el funicular “posee una historia rica en movimiento, centrada en el Parquemet, el cerro San Cristóbal y los cerros circundantes, que son el corazón de Santiago. Sin duda, es una obra significativa de su época, ligada a la historia de la región Metropolitana y de Santiago, y un espacio que muchos hemos disfrutado en familia.”
El funicular opera de martes a domingo de 10:00 a 18:45, y los lunes de 13:00 a 18:45 (cerrado el primer lunes del mes). El pasaje de ida hacia la cumbre cuesta $1.600 de lunes a viernes y $2.050 los fines de semana. Los tickets de ida y vuelta son $2.250, mientras que los fines de semana cuestan $2.950.
Alberto Mackenna, exintendente y sobrino de Benjamín Vicuña Mackenna, fue quien impulsó la construcción de caminos, miradores y del funicular en 1921. Se inauguró el 25 de abril de 1925, durante el gobierno de Arturo Alessandri Palma, y fue declarado Monumento Histórico en 2000, siendo un símbolo en la memoria colectiva de los santiaguinos y un referente de la ciudad.
Los carros del funicular fueron importados de Milán, elaborados por la firma Ceretti y Tanfani, con una capacidad para 50 personas. Inicialmente, había distinción entre primera y segunda clase: la primera contaba con techo y asientos; la segunda, carecía de ambas comodidades. El trayecto original duraba 15 minutos.
En 1968, el techo de madera original fue reemplazado por uno de acero y tela, similar al que se usa actualmente.
En 2019, Parquemet del Minvu inició un proyecto de conservación y restauración de tres años. Reabrió sus puertas al público en 2022, y el año pasado se llevaron a cabo obras para mejorar la accesibilidad universal, como la rampa en la estación Pío Nono y el ascensor en la estación Cumbre.
Hoy en día, el funicular cuenta con un carro con capacidad para 40 personas, recorriendo una pendiente de 500 metros en un tiempo aproximado de 7 a 10 minutos. La operación está a cargo de Turistik.
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PURANOTICIA
Con Información de puranoticia.pnt.cl