El Hospital de Quilpué, que forma parte de la red del Servicio de Salud Viña del Mar – Quillota – Petorca, ha dado la bienvenida a tres médicos becarios de la Universidad de Valparaíso que se incorporan al hospital para iniciar sus estudios de especialidad.
Estos profesionales estarán dedicados a la Medicina Interna, donde adquirirán las habilidades necesarias para convertirse en especialistas.
Los médicos Giovanna Peirano, Catalina Pino y Cristián Robles pasarán los próximos tres años formándose en esta especialidad, tras haber conseguido la beca del concurso CONISS del Ministerio de Salud. Durante este periodo, desempeñarán un papel clave en la atención integral del paciente, lo que facilitará una vigilancia clínica más cercana, una toma de decisiones más ágil y una actualización constante de protocolos basados en la evidencia.
La jefa de Medicina Interna del Hospital de Quilpué, Dra. Gabriela Hernández, expresó que “desde mi rol como encargada de docencia en este campo clínico, considero que la inclusión de estudiantes de postgrado en el servicio clínico es esencial para fortalecer tanto la atención médica como el desarrollo académico de la institución, además de reforzar el modelo de atención centrado en el paciente”.
Asimismo, la dirección de la especialidad resaltó la contribución de los médicos en la discusión constante de casos clínicos y su interacción con el personal médico, lo que fomenta un enfoque analítico y crítico que mejora la calidad de atención para cada paciente. “La presencia de estos profesionales en formación también contribuye a la humanización del cuidado, promoviendo una relación médico-paciente más cercana y empática”, comentó.
En esta misma línea, la Subdirectora de Gestión Asistencial del Hospital de Quilpué, Dra. Ximena Freitte, valoró la labor docente del hospital y su impacto positivo para los profesionales y los pacientes.
“Como hospital docente, tenemos el deber y el privilegio de formar profesionales. Recibir médicos becarios es ventajoso porque vienen con muchas ganas de aprender y a muchos de nosotros nos gusta enseñar, lo que genera un feedback positivo que nos motiva a mantenernos actualizados para el beneficio del paciente. Agradezco a la universidad por posibilitar nuestra contribución a la formación de médicos íntegros, en lo humano y lo profesional, para el bienestar del país”.
“UN DESAFÍO INFINITO”
La Dra. Catalina Pino realizará su beca en la misma universidad con campo clínico en el Hospital de Quilpué. “Espero aprovechar al máximo estos tres años para aprender todo lo que pueda. Estoy feliz de haber conseguido la especialidad que quería, en el lugar que quería. Hice toda mi formación aquí, desde el colegio hasta la universidad, y me gusta mucho el ambiente. Siento un cariño especial por la comunidad y deseo retribuir a la población”.
Por su parte, la Dra. Giovanna Peirano compartió su perspectiva sobre esta etapa: “Medicina Interna es un desafío infinito. Me apasiona tener un enfoque integral del paciente, aprender más cada día. Eso es lo que me motiva. Además, el ambiente aquí ha sido muy acogedor y el personal docente ha sido maravilloso, lo que ha mejorado aún más la experiencia.”
Al finalizar su beca, los y las estudiantes deberán retribuir esta subvención pública desempeñándose como especialistas en la red asistencial.
PURANOTICIA
Con Información de puranoticia.pnt.cl
